lunes, 7 de julio de 2008

(Vieja) entrevista a Sigur Rós

Hace unos días se editó el nuevo disco de Sigur Rós en nuestro país. Todavía no lo escuché en detalle, pero el hecho me hizo acordar que, en algún lugar del disco rígido de mi PC, tenía una entrevista con Georg Hólm, bajista de la banda islandesa, que realicé para Rolling Stone en 2006 y no fue publicada.
A continuación, la nota inédita.

“La música actual es como comer en McDonald’s”

Georg Hólm, bajista de la banda islandesa, critica a Britney Spears, a las discográficas y se divierte atrapando peces con los dientes. Por Maximiliano Poter

Alguna vez, la revista Melody Maker describió la música de Sigur Rós como “el sonido de Dios llorando lágrimas doradas en el Cielo”. Es una definición tan exagerada como gran parte de la prensa británica, pero en cierto punto es acertada: sin dudas, la obra de este cuarteto resulta celestial, y escucharlos puede ser toda una experiencia religiosa que, para algunos, reúne lo angelical de Cocteau Twins con la melancolía de Radiohead y la experimentación de Pink Floyd.

Según Georg Hólm, bajista de la banda, “es muy difícil escribir sobre nuestra música porque es casi imposible explicarla; hay que oírla. Creo que le hacemos la vida difícil a los periodistas”. Y así parece. “Goggi”, como le dicen sus amigos, es el más comunicativo de un grupo muy reticente a los flashes y las entrevistas. Pero su hablar es tan dubitativo y escueto que es capaz de deprimir hasta a un radiograbador y su “verborragia” echa por tierra ese halo de “intelectualidad” que rodea al conjunto. “Eso puede verse así por la actitud que nuestro sonido crea, pero sólo somos cuatro jóvenes de Islandia haciendo música. Así de simple”, se defiende.

Los avatares del éxito parecen incomodarlos, y no es para menos teniendo en cuenta lo repentino del mismo. Pasaron de vender 300 copias en su país de su debut Von, en 1997, a 500.000 en todo el mundo de su sucesor, Ágætis Byrjun, dos años más tarde. De pronto, Sigur Rós sonaba en comerciales, series de TV, películas de Hollywood (como Vanilla Sky) y en los estéreos de innumerables personalidades que se confesaron fans incondicionales: desde Tom Cruise y Brad Pitt hasta Tommy Lee, baterista de Mötley Crüe.

La respuesta ante semejante acogida fue la introversión: en 2002 editaron un álbum titulado ( ), de canciones oscuras sin nombres y, encima, cantadas en un idioma creado por ellos mismos, llamado “Hopelandish”. Lejos de rechazarlos, el mundo los aclamó con dos nominaciones al Grammy.

Ahora regresaron con Takk..., un disco más equilibrado que, sin salir de la geografía etérea y misteriosa de su propuesta, ofrece puertos más accesibles y terrenales que, seguramente, les permitirá llevar más público en su viaje por las nubes.

Lo que hacen parece el resultado de la improvisación y la experimentación en el estudio, ¿es así?
Sí, todo se basa en juntarnos y tocar cualquier cosa. Normalmente, alguien se pone a tocar la batería o los teclados, y de todo eso sale algo. Es un proceso muy cooperativo.

En el último disco volvieron a las letras, ¿de qué trata el álbum?
Es como una serie de mini-aventuras. Por lo general, a lo largo un disco tratamos un tema, pero en éste simplemente hay cosas sueltas que escribimos, recuerdos o algo que anotamos. Es difícil de explicar.

Dicen estar a favor del download de música por Internet. ¿No es contradictorio, considerando que están con EMI, una multinacional que condena esa práctica?
No, siempre lo apoyamos. Hay una sola razón por la cual las compañías están en contra y es porque ahora tienen menos música buena. El 90 por ciento de lo que editan es terrible, realmente malo. Ellos se están dando cuenta de que, cuando la gente se baja algo y le gusta, va y lo compra.

El disco anterior recibió dos nominaciones al Grammy, ¿No es un logro raro para un álbum con canciones sin títulos cantadas en un idioma inventado?
Creo que es fantástico y, quizás, es un signo de que las cosas están cambiando. Tal vez no solo la gente que compra los discos, sino también quienes los lanzan se estén dando cuenta de que no pueden vender música de mierda todo el tiempo. La gente necesita algo con sustancia. La música actual es como comer en McDonald's todos los días, y hay que empezar a comer buena comida.

¿Qué es “música de mierda” para vos?
Creo que lo que hace Britney Spears es muy innecesario. No debería permitirse su existencia. Aunque, si no existiera, ¿cómo podrías diferenciar lo bueno de la basura?

¿Qué se puede hacer un sábado a la noche en Islandia?
No hay muchas cosas que puedas hacer durante el invierno. Si consigo niñera, me gusta salir a cenar o ir a un bar. Pero normalmente me quedo en casa.

Sé que no les gustan las giras. ¿Qué hacen para divertirse?
No sé, somos bastante aburridos y no hacemos cosas locas. Una vez pasé más de una hora y media en el jardín afuera del estudio con un micrófono, grabando cómo arrancaba el pasto.

¿Es verdad que podés atrapar peces con los dientes?
Sí.

Pero, ¿cómo hacés?
Y... con los dientes. No sé. Sentite libre de agregar lo que quieras al respecto.

2 comentarios:

El Tribuno dijo...

Buena entrevista, lástima que no se publicó en RS. Y bueno ya que estamos en esto, ¿porqué no la publicaron?

Maximiliano Poter dijo...

Hola. No se publicó porque hubo otras prioridades editoriales. En todos los medios siempre quedan afuera notas ya sea porque entra una publicidad a último momento y levantan la página, o bien porque tienen otras urgencias periodísticas. ¿Sabés la cantidad de notas, entrevistas y críticas "inéditas" que tengo? Son gajes del oficio. Gracias por tu comentario.