martes, 24 de febrero de 2015

La caja inteligente

Internet y las nuevas tecnologías están cambiando el consumo de entretenimiento. ¿Cómo serán las series y películas del futuro? ¿Dónde veremos noticieros o escucharemos música? Un vistazo al mañana del esparcimiento digital.



El futuro del entretenimiento digital puede resumirse en tres W. ¿World Wide Web? No exactamente. En los despachos de los grandes estudios de cine y televisión, así como en las oficinas de pequeñas productoras y en las cabezas de los creativos audiovisuales, se habla de la última máxima para la creación de contenidos: «Whatever content they want, whenever they want it, wherever they want it». Traducido: Lo que deseen, cuándo y dónde lo quieran.

No interesa si es un capítulo de Game of Thrones, el último videojuego de Angry Birds, el trailer de The Hobbit, un partido de fútbol o el nuevo disco de U2. El consumidor quiere disfrutar de todo lo que le gusta al instante, de manera fácil, sin importar el dispositivo, el lugar, los horarios o de dónde y cómo le llega ese contenido. Así, «la nube» de Internet aparece como la plataforma donde se montan los nuevos proveedores de entretenimiento digital. ITunes es un paradigma en este sentido: un servicio que ofrece música, series, películas y aplicaciones para diversos equipos, desde la televisión (vía el equipo Apple TV) hasta desktops, laptops, tablets y smartphones.

Netflix es otro ejemplo de los cambios en el mercado y cómo las compañías deben adaptarse los nuevos esquemas del negocio. La firma, que comenzó siendo un sistema de alquiler de DVD por correo en 1997, evolucionó para convertirse en un servicio de streaming on demand con más de 50 millones de suscriptores, que no solo provee series y películas, sino que hoy hace sus propias producciones (como los celebrados shows House of Cards, Orange is the New Black y Hemlock Grove, entre otros).

Pero, más allá de la transformación y aparición de empresas que darán nuevas formas al negocio, ¿a qué tipo de entretenimiento podremos acceder en los próximos años? ¿Cómo será y dónde lo podremos disfrutar? Algunos sostienen que parte de esa respuesta ya está en nuestros bolsillos.

De acuerdo a un informe de la consultora comScore, en 2014 uno de cada tres minutos que se pasa en los medios digitales se da a través de un smartphone o tablet. Hoy, los dispositivos móviles compiten con la TV como principal fuente de atención o la complementan como una «segunda pantalla». Crece y crece la práctica de comentar en redes sociales lo que se está viendo en «la caja boba», sea el superclásico o la entrega de los Oscar. En concreto, el uso de Twitter tuvo influencia en el 11% de los programas de TV del Reino Unido, que lograron un aumento de al menos un 2% en su audiencia, según el último estudio del Broadcasters Audience Research Board de este año. Mientras que Nielsen, en Estados Unidos, señaló que el social networking puede aumentar hasta en un 29% el rating de un programa.

Pero el futuro abre nuevas posibilidades para dar un uso más amplio, audaz y primordial de esas pantallas hoy secundarias. «Entramos en una era donde todas las pantallas trabajaran casi en conjunto y será la atención del usuario, a través de arcos argumentales y otras convenciones, lo que determinará cuál es el dispositivo principal. Pronto, el tamaño no importará», se vaticina desde un análisis de Ernst & Young (E&Y) de 2013 sobre las nuevas tendencias en medios y entretenimiento.

En sintonía, el informe imagina ficciones donde los personajes aparecen en diversos equipos que dialogan e interactúan entre sí, creando una surround picture. O historias cuyo guión requiere la intervención del espectador, que puede tomar decisiones desde su celular, al modo de aquellos libros de Elige tu propia aventura.

Ver TV ya es un acto social. Un estudio de Empower MediaMarketing encontró que el 75% los norteamericanos miran el Super Bowl acompañados de una o más personas, y un 26% lo hace en grupos de seis o más amigos. Y cada vez se estila más reunirse ante el televisor, cual fogón digital, para «participar» del Mundial de fútbol, el final de temporada de American Idol o la alfombra roja del Golden Globe.

El contenido muta cada vez más hacia la idea de «evento». Según Ernst & Young, «el éxito en el futuro residirá en cómo construir suficiente experiencia social alrededor de un programa para que los espectadores no quieran quedarse afuera. La tendencia evoluciona desde el viejo concepto de la “tele que hay que ver” hacia la “tele que hay que vivir”».

Por otra parte, a medida que bajan sus costos, las pantallas se multiplican en los hogares, y se podrían generar nuevos contenidos que aprovechen esta ubicuidad. Imaginemos poder ver, por ejemplo, el noticiero de las mañanas, de manera ininterrumpida y automática, a medida que nos desplazamos por nuestro hogar: desde que nos levantamos en la habitación, pasando por el living o mientras nos lavamos los dientes delante del espejo del baño.

Incluso se podría pensar en contenidos que cambian según el contexto del televidente: ofrecer recetas cuando se enciende la cocina, o una programación nocturna específica a la hora de ir a la cama. En este sentido, los celulares y nuevos relojes inteligentes pueden servir como sensores y controles para establecer ubicaciones y hasta personalizar gustos y experiencias.

Smart es el adjetivo que define los nuevos gadgets tecnológicos, pero no por la cantidad de opciones que pueden ofrecer hoy, sino por cuán ágiles podrán ser mañana para aprender y conocer nuestros hábitos. Basta de navegar incompresibles e impersonales guías de programación en la TV. Ya existen tecnologías que pueden detectar rutinas e intereses regulares y ofrecer opciones de contenidos individualizados.

Podríamos tener dispositivos y servicios que «sienten» el contexto y entregan una programación adaptada a los patrones de consumo. «Llevado al extremo, el home entertainment podría estar integrado con multiplicidad de equipos —imaginan desde E&Y—. ¿Se detecta un ritmo cardíaco y de respiración acelerado? Quizás el usuario esté haciendo ejercicio, y los smart devices puedan ofrecer música y programas acorde a esa situación. ¿Niveles bajo de dopamina? Quizás sea momento de unas comedias para levantar el ánimo».

Ubicuo, omnipresente, social, interactivo, contextual y personalizado. Así será el entretenimiento del futuro, que ya está aquí, dónde y cómo lo desees.

Publicado en revista S/O - Simonetta Orsini, 2014.

lunes, 23 de febrero de 2015

Kongos: corazón africano

Una de la bandas revelación de 2014 habló antes de su presentación en el Lollapalooza Argentina 2015.


La edición 2015 del festival Lollapalooza Argentina tiene una grilla repleta de nuevos talentos en ascenso, entre ellos, este particular cuartero de hermanos multinstrumentistas (Johnny, Jesse, Daniel y Dylan Kongos), hijos del músico sudafricano John Kongos, autor en 1971 de los clásicos Tokoloshe Man y He’s Gonna Step on You Again (que Happy Mondays versionó y volvió a convertir en éxito en 1990, bajo el título “Step On”).

Kongos suena a unos Kings of Leon tribales que canibalizan tanto a su padre como a John Lennon, Coldplay y Paul Simon para alimentar un sonido que tiene corazón africano y ambición mainstream. Canciones en las que el maskandi y los sonidos del Soweto piden permiso entre la épica radial y el gancho de unos Imagine Dragons. Los singles “I’m Only Joking” y “Come With Me Now” fueron éxitos en Estados Unidos durante 2014, tres años más tarde de su lanzamiento original como adelantos de su segundo álbum, Lunatic (2012). “El mercado de Estados Unidos es tan grande, hay tantos artistas en cada ciudad, que a veces lleva mucho tiempo solamente que se sepa que algo existe. Para nosotros, sucedió en Denver, Colorado: un par de radios empezaron a pasar las canciones, otras comenzaron a prestarnos atención, un DJ las incluyó en su setlist, y eso nos ayudó a despegar. De lo contrario, hay tanta música y tan diferente que es difícil hacerse notar”, cuenta Johnny Kongos a Generación B, en una charla antes de la presentación del grupo en el Lollapalooza Argentina, los próximos 21 y 22 de marzo.
Mucha gente cree que son una banda de Sudáfrica. ¿Cómo se dio ese vínculo?
Mi viejo nació en Sudáfrica. Y conoció a mi mamá, que es estadounidense, en Inglaterra cuando trabajaba allá como músico. Dos de mis hermanos y yo nacimos en Londres, y nos mudamos hacia el final de los 80 a Sudáfrica, donde nació mi otro hermano. Ese fue nuestro hogar hasta que nos fuimos a vivir a Phoenix, Arizona, a mediados de los 90. Esos ocho años en Sudáfrica tuvieron una gran influencia en nuestra música y en nuestra vida en general. Es un lugar maravilloso donde crecer, tengo recuerdos muy divertidos, y solemos volver cuando estamos de vacaciones; es una parte muy importante de nuestra vida.

En la banda se escucha una mezcla de estilos, pero es fuerte la influencia sonora de tu padre. ¿Cómo fue crecer con una leyenda del rock? 
¡Fue genial! No tengo con qué comparar, pero fue muy positivo. Y no solo en materia de música, sino en la vida, en el apoyo. Claro, fue una gran influencia en las experiencias de escucha que tuve de chico. Y, más tarde, cuando nosotros empezamos hacer música, obviamente eso se reflejó.
Mamá y papá se aseguraron de que aprendiéramos música desde pequeños, pero no estoy seguro de que tuvieran alguna gran expectativa o plan maestro. Solo querían que tuviéramos música en nuestra vida de una manera u otra. Después, nos hicimos adolescentes y empezamos a divertirnos componiendo juntos, entonces decidimos que era un camino que queríamos seguir.

¿Cómo te enganchaste con el acordeón? No parece el instrumento que elegiría un adolescente…
No, ja, ja. Mi papá tenía un acordeón en el estudio y estábamos grabando una canción para el primer álbum. Para una parte instrumental, usamos todo lo que encontramos por ahí y, de última, dijimos: “a ver, probemos con el acordeón”. Y funcionó, fue algo que hizo “clic”. Creo que eso se debió a parte de lo escuchamos mientras crecíamos, desde The Beatles hasta música armenia y Ástor Piazzolla. Lo escuchamos durante años, era un sonido familiar para nosotros, pero perdido para gran parte del mundo. Particularmente en los Estados Unidos, es un instrumento odiado porque algunos artistas lo usaron de una manera muy cursi e irritante.

¿Te vas a meter entre el público para ver a qué artista del Lollapalooza Argentina?
Sí, me gustaría ver de nuevo a Foster the People. Los vimos el año pasado y son muy buenos en vivo. Estos festivales suelen ser una locura y espero que tengamos tiempo para disfrutar los otros shows. El problema es que tenemos que volar al día siguiente.

Los cuatro están de gira desde hace muchísimo presentando el álbum. ¿Qué fue lo más loco que les pasó?
En el último año estuvimos viviendo arriba de un bus por nueve meses. No hay necesariamente un solo y gran hecho divertido, sino que eso en sí mismo es demencial. Nueve meses, en un micro. Imaginate.

¿Cómo es trabajar entre hermanos? 
Está buenísimo, porque nadie te saca de las casillas como un hermano. Pero es algo positivo, porque desarrollamos un nivel de confianza y de unión gracias a trabajar en el estudio, largas noches. Hay mucho amor. 

Vamos: ¿no tuviste ganas de revolearle el acordeón por la cabeza a alguno?
Ja, ja. Mmm… el acordeón podría causarles una lesión grave. Tal vez, usaría los palillos.


domingo, 8 de febrero de 2015

Apps de bandas y artistas

Una selección de aplicaciones para smartphones y tablets específicas de grupos y solistas que quieren ir más allá del disco.



Björk - Biophilia 

No puede explicarse como una simple app: este es un viaje al interior del octavo disco de la voz islandesa para vivenciarlo. Realizado en conjunto con diversos artistas gráficos, Biophilia permite jugar e interactuar con todas las canciones, cada una como si fuera una app distinta, pero reunidas en una especie de constelación temática. ¿Dónde empieza el disco y dónde termina el software? A diferencia de otras aplicaciones, que son meras herramientas de información y marketing para acompañar un lanzamiento, esta es una verdadera obra que integra música y tecnología en una experiencia única.



Blur: The App  

Cuando la banda británica cumplió 21 años, lo celebró con una completísima aplicación gratuita que servía de compañero virtual para el box set conmemorativo que se editó en su momento. La app incluye mucho material inédito, como demos y remixes de canciones, un archivo de entrevistas y kits de prensa, además de clips de conciertos que no habían sido editados antes. Permite disfrutar de los 27 videos del grupo, además de contar con la discografía completa (incluyendo promos y rarezas) y ofrece una línea de tiempo con toda la historia de la banda. Todo el contenido se puede compartir en redes sociales. Y, encima, es gratis.


Lady Gaga – ARTPOP


Se trata de un extravagante compañero virtual para el álbum homónimo, que combina música y herramientas de creaciones visuales con la posibilidad de interactuar con la numerosa base online de fans de la cantante. Funciona mediante una asistente llamada Petga, que te ayuda a crear tu “aura”, suerte de avatar personal para navegar la aplicación en función de tus principales gustos e intereses (fotografía, cine, teatro y más). Cumplido ese paso, es posible usar herramientas para crear imágenes (como GIF animados), escuchar el álbum (siempre y cuando lo hayas comprado, claro) y chatear con la comunidad LittleMonsters.com. La artista dijo que la app “es un sistema de ingeniería musical y visual que combina audio, arte, moda y tecnología en una nueva comunidad interactiva mundial, las auras. Alterando la experiencia humana, llevamos el arte al pop, en una expedición warholiana a la inversa”. ¿LO QUEEEÉ? No importa, los fans la entienden.




The Rolling Stones Official App
Para su 50.o aniversario, las majestades satánicas lanzaron una aplicación para tener en el bolsillo noticias, videos, fotos y biografía de la banda. Permite conectarse con fans de todas partes del mundo que la tengan instalada, además de escuchar fragmentos de las canciones de toda su discografía y acceder a comprar merchandising oficial. Tiene una sección paga que habilita contenidos exclusivos, como entrevistas especiales con los músicos.


Radiohead – PolyFauna

En la senda de Biophilia, es una app que ofrece una experiencia de escucha multimedia. La pantalla del celular o tableta se convierte en una suerte de ventana a un extraño y misterioso mundo digital, que uno puede recorrer moviendo el dispositivo (actúa mediante el uso de sus acelerómetros y giroscopios) en búsqueda de un punto rojo, que será como un portal hacia nuevos paisajes. Lúdico y sobrecogedor, como todo lo que sale de la cabeza de Thom Yorke y compañía.



The Beatles: Rolling Stone's Beatles Album-by-Album Guide
No es una app oficial de la banda, pero es un documento imprescindible para sus fans. Un verdadero viaje al interior del catálogo de los Beatles de la mano de los editores de la popular revista de rock, con la historia de todos sus discos, audio samples de cada canción y decenas de fotografías. Incluye estadísticas y datos sobre cada lanzamiento, además de comentarios a cargo de artistas como James Taylor, Stevie Nicks, Liz Phair, Liam Gallagher y Stephen Malkmus, y una guía sobre todos los singles y temas que no integraron ningún disco. Los 4,99 dólares mejor invertidos de tu vida.


Brian Eno – Scape

El pionero del ambient tiene varias aplicaciones para componer música (como Bloom y Trope, también diseñadas en conjunto con Peter Chilvers), pero Scape es una de las más interesantes. Permite componer música en base a la elección de fondos, formas y colores. Con solo arrastrar los elementos, se van sumando sonidos que se pueden combinar de múltiples maneras. Las creaciones pueden sonar como background de otras apps, guardar y compartir online. Para dejarse llevar por lo que ofrece la pantalla y hacer volar nuestra imaginación.



Kiss – Kiss Me! Official Photo App
Todos alguna vez quisimos ser parte de Kiss y lo más cerca que estuvimos fue habernos pintarrajeado la cara. Bueno, con esta app este tema se terminó. El programa usa la cámara del smartphone para tomar fotos y maquillarte y vestirte automáticamente como tus ídolos. ¿Querés lucir la estrella de Paul, tener la lengua de Gene o calzarte la guitarra de Ace (bueno, ahora de Tommy)? Solo es cuestión de instalar esta app, que permite compartir esas fotos personalizadas en tus redes sociales y hasta ofrece emoticones animados de Kiss. Rock & Roll all nite and selfies every day!


Fall Out Boy - Fall Out Bird

¿Se acuerdan de Flappy Bird? El jueguito sensación, que fue retirado a principios del año pasado tanto de AppStore como de Google Play por su creador (un programador vietnamita) por ser “muy adictivo”, tuvo su clon en las cabezas del cuarteto pop-punk de Illinois. Lástima que duró online aún menos que su progenitor.


Dream Theater - DreamTheater360°
¿Quién no quiso subirse al escenario para estar junto a sus ídolos? Si sos fanático de estos titanes del metal progresivo, lo podés hacer desde tu tableta o celular con esta app que incluye cinco canciones interactivas filmadas utilizando la tecnología Mativision, que te pone virtualmente arriba de las tablas del último concierto que la banda dio en nuestro Luna Park. Permite dirigir el show usando seis cámaras diferentes, rotar sus ángulos, hacer zoom o, simplemente, emplear el modo “piloto automático” para disfrutar del espectáculo sin interactuar. La app también incluye biografía, discografía, fotos e información actualizada continuamente sobre giras, novedades y redes sociales del grupo. Precio: U$S 9,99.