Se estrena Los Pitufos y hacemos un recorrido por lo malo y lo menos malo que nos dejó el paso del cartoon al live action en la pantalla grande.
Antes que nada: El historial de adaptaciones de dibujos animados al cine “vivo” es tan, pero tan catastrófico, que resultó imposible seleccionar cinco películas y calificarlas como “mejores” de este rubro. Por eso, las agrupamos como “las menos malas”. Hecha la aclaración, pasemos a la discusión.
Lo menos malo
5. El inspector Gadget (1999)
El dibujito del detective cyborg mezcla del Inspector Clouseau y Maxwell Smart (Don Adams incluso le puso la voz original) tuvo su versión de carne y bits en la interpretación de Matthew Broderick que, vamos, fue lo más decoroso de esta producción de Disney. Pese a las pobres críticas, el film generó lo suficiente como para hacer una secuela en 2003 que fue directo al video. Ya era un nuevo milenio y tiempo de decirle “Go, Gadget, go away”.
4. Los Pitufos (2011)
Si bien tienen su origen por fines de los 50 en el cómic del dibujante belga Peyo, los suspiritos azules lograron fama mundial gracias a la serie animada de TV de Estados Unidos producida por Hanna-Barbera en los 80. Los pequeñitos, ahora revitalizados por la magia del cine digital y 3D hollywoodense, escapan de su utópica aldea socialista perseguidos por Gargamel y terminan en Nueva York, donde descubren las bondades del capitalismo moderno: Pitufina se entera de que puede tener más de un vestido, Gruñón endulza su mufa con M&M’s y todos entonan la insoportable pituficanción al compás del Guitar Hero Aerosmith. ¿Vieron, chicos? Al final, los comunistas siempre se venden.
3. Casper (1995)
Una simpática comedia ATP protagonizada por Christina Ricci y Bill Pullman que resultó un buen ejemplo de cómo se puede recuperar un personaje olvidado de los años 40. El gag de “Gasparín” imitando a Schwarzenegger vale que la vuelvas a alquilar (si es que encontrás un videoclub fantasma).
2. Las tortugas ninja (1990)
Leonardo, Donatello, Miguel Ángel y Rafael nacieron en la historieta, se hicieron populares en la TV y fueron un suceso mundial en el cine con esta película que no caducó en el tiempo y demuestra cuánta magia hay en los efectos especiales tradicionales. Una masa (y no de pizza).
1. Transformers (2007)
Pueden decir lo que quieran del pirotécnico cine de Michael Bay (Armageddon, Pearl Harbor), pero su trilogía sobre la lucha entre Autobots y Decepticons es un festival para los ojos (además de una de las franquicias más exitosas de la historia). Claro, los guiones patinan y lo único que te puede hacer carburar son los camiones de Megan Fox y Rosie Huntington-Whiteley, pero, para mí, ya es mérito suficiente que la película haya resuelto los dos grandes misterios del dibujo animado: ¿Por qué si Megatron era del mismo tamaño que otros transformers cuando se convertía era tan grande como un revólver? ¿Y dónde corno se metía el trailer de Optimus Prime cuando se transformaba? ¿Eh? ¿¿Eeeehh??
Lo peor
5. Aeon Flux (2005)
Buenas intenciones, grandes locaciones, pésimo casting. La bella Charlize Theron resultó algo rellenita y carente de malicia pícara para darle vida a la fibrosa y elástica terrorista sadomaso creada por el genial dibujante Peter Chung, para ese gran ciclo de animación llamado Liquid Television que daba MTV en los 90. Quizás Uma Thurman teñida de morocha hubiera sido una mejor opción (más después de ver su gimnástica y sangrienta performance en Kill Bill).
4. Masters of the Universe (1987)
Este traspaso a la pantalla grande de la popular línea de juguetes y serie animada de He-Man seguramente aniquiló la infancia de cualquiera que hoy tenga entre 30 y 40 años. Aparentemente, el poco presupuesto del film se gastó en aceite para el cuerpo de Dolph Lundgren y dicen que ningún tigre accedió a pintarse de verde para hacer de Cringer / Battle Cat y ser parte de este bochorno. Frank Langella zafó porque se consiguió una careta de Michael Jackson para personificar a Skeletor. Se rumorea que, por culpa de este film, Eternia dejó de dar visa a los humanos…
3. El último maestro del aire (2010)
La serie animada original es uno de los productos más exitosos de Nickelodeon, sobre un niño capaz de controlar las fuerzas de la tierra, el agua, el aire y el fuego en un mundo dividido en esas cuatro naciones. Pero Night Shyamalan (El sexto sentido, Señales) mostró su poder para hacer humo una potencial franchising con el peor y más caro film de su decadente carrera. Un fiasco artístico y comercial que, al menos, obtuvo varios premios Razzie (los anti-Oscar), incluido el de peor película.
2. Scooby-Doo (2002)
OK, debo reconocer que tengo un problema personal con este film. Por aquel tiempo, llevé a mi sobrinito a ver Mercano, el marciano, pero ese día no la daban y la única opción era meterse en esta adaptación de los detectives de lo sobrenatural ideados por Hanna-Barbera allá por 1969. Desde entonces, él es un chico algo retraído y nunca más me dirigió la palabra. Lo entiendo: es lo menos que se merece cualquier persona que haya sometido a una criatura a semejante sufrimiento.
1. Los Picapiedras (1994)
Esto se resume muy fácil: vean el trailer y, luego, el de la versión porno. Díganme ustedes cuál película tiene más dignidad.
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