Lo que dejó el estreno de la remake de la famosa serie sci-fi de los 80.
Si sos de los que hacen su propia programación televisiva gracias a Internet es muy probable que sepas que ayer se estrenó en Estados Unidos la nueva versión de V, célebre serie de ciencia ficción de los 80 que mostraba la lucha de un grupo de humanos contra la invasión de unos lagartos extraterrestres comerratones.
Modernizada, reestilizada, con varios aciertos y puntos flojos, el piloto de la remake dejó varias cosas para tratar (y dudar).
1. Lo mejor es la vuelta de tuerca al guión original. Los aliens están en la Tierra desde hace años, actuando como una "célula terrorista dormida", y su supuesto arribo no es más que el despertar de una nueva etapa en sus planes contra la humanidad. Este detalle es vital: pone la historia en sintonía con la paranoia yanqui (y global) post 9-11 (más si tenemos en cuenta que la acción en el piloto transcurre en New York) y permite una nueva dinámica argumental, ya que tu mejor amigo, compañero de trabajo o jefe puede ser un "visitante" (en un juego de identidades muy similar a la desconfianza "humano o cylon" de Battlestar Galactica).
2. En estética, lo visto hasta ahora fue poco pero impecable. Las naves tienen un look retrofuturista muy atractivo, y el detalle de que la nodriza se transforme en un megatelevisor de quichocientas pulgadas fue un flash. Lo mismo para las actuaciones: Elizabeth Mitchell (Lost), como una estoica agente del FBI, otorga el componente policial; Joel Gretsch (Taken, The 4400), como un cura que ve cuestionadas sus creencias, pone la cuota de fe en la resistencia; y Morena Baccarin (Firefly), la líder de los invasores, es una versión mucho más fuerte (en todo sentido) de la vieja "Diana" (ahora llamada Anna).
3. Quizás me gane muchos enemigos por lo que voy a decir, pero dudo sobre la decisión de los autores de dejar que los aliens tengan apariencia de lagartos. Sé que este es uno de los pilares estéticos de la serie y hasta un guiño para los viejos fans, pero tengo miedo de que la imagen de los reptiles (que aún no se vieron por completo) socave la "seriedad" del programa. Nadie espera que los bichos 2009 sean tan ridículos como sus antepasados ochentosos, pero su permanencia trae vergonzosos recuerdos y comparaciones, además de quitarle sorpresa al show.
4. Lo peor de este primer episodio fue la velocidad e inverosimilitud de su desarrollo. En 45 minutos, llegan los extraterrestres, curan enfermos, hay gente que comienza a dudar de sus propósitos en el planeta, se forma una resistencia, descubren que son lagartos enmascarados, aparecen aliados, y todo entretejido con endebles tramas de conflictos personales de los principales protagonistas. Dio la sensación de que los guionistas dijeron "contemos todo de una, total el espectador ya sabe cómo es la cosa". Así se perdió intriga, tensión y se olvidaron de una regla muy importante: al suspenso hay que darle tiempo. Pero claro, esto tiene que ver con el siguiente punto.
5. ABC solo transmitiría cuatro episodios, y la serie regresaría en la primavera boreal. Mmmhhh... Por lo visto, V se escribe con v de "veremos".
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